sábado, 9 de mayo de 2009

Ay , que gustito pa mis orejas


Nadie salió a recibirme , la casa estaba silenciosa y oscura . Una siempre había sido mas particular , nunca había salido a saludar ni a mi ni a nadie así que que si no llega a ser por la falta de la otra , ni siquiera me hubiese parado a pensarlo . Pero....que raro , quizás habían salido a despejarse , aún hacía buena tarde. Con la convicción de que estaba sola en casa , entré en el baño , fuí a la terraza , me descalcé y me puse las zapatillas ( es una de esas cosas que hago de forma automática varías veces al día ) y me dirigí a mi cuarto para ponerme ropa cómoda .

Para entrar en mi habitación hay que pasar por el salón ( mejor dicho estancia de veinte metros cuadrados donde hacemos la vida ) y me quedé mirando al sofá sin poder mediar palabra . Allí estaban las dos , ni siquiera se dieron cuenta de que eran observadas , entregadas al placer , sin emitir sonido alguno , sin oir , sin percibir nada que pasara fuera de ellas mismas.

Mi sorpresa no fué por el hecho de que sean del mismo sexo , pero no hace ni tres meses que están juntas y sospechabamos que una no era del agrado de la otra y, que narices , que aquella escena sordida sorprendería a cualquiera . Espero poder mirar a Lupe sin recordarla con su cabeza perdida entre las zonas mas íntimas de Lola y sobre todo , borrar de mi mente la expresión de entrega de esta última aunque , pensándolo bien ,¿ quién rechaza una cosa así a la hora de la siesta ?.

Espero que entendais que respetando su privacidad , solo he dejado plasmado el momento del cigarrillo